Cambio de mis dieces a los veintes como se cambia de novio, cada mucho tiempo:
Empece cambiando el sillon por un suelo con respaldo
Los zapatos por zapatillas
Y los bolsos por mochillas
(Aunque siempre me dijeron que seria al reves)
Empece a cambiar,
incluso puede que a peor.
Y tu viniste conmigo
Cambie de paisaje,
cuando miraba alrededor de la misma cuidad
y todo parecia distinto, pero contigo
Cambiábamos de color,
de estacion,
de lapiz,
de cama,
de pelo e incluso de mirada
Y por cambiar,
quisimos hasta cambiar el mundo,
vivir del arte,
y vivir grande
(sin el ' a lo' que lo suele preceder)
disfrutar sencillo
y probar lo nuevo,
para cambiar,
incluso puede que a mejor
Cambie de musica,
el musical en el que vivir,
mis tiempos y tus letras.
Cambiaste (y por primera vez tu eres el unico culpable) mi noche madrileña,
sus bares y sus atardeceres de altura.
sus bares y sus atardeceres de altura.
Cambiaste mis libros y ya puestos a cambiar, hasta el fin del verano
Cambiabamos de cuidad cada noche, sin salir de las mismas cuatro paredes
E incluso en cada cena cambiaba de ideas, aunque seguia en mis trece
Cambiabamos de rumbo,
cada cinco minutos
para acabar donde el principio,
pero siempre un poco mas borrachos
Cambiabamos de plan,
para planear algo mejor
en una esquina de cualquier plaza
Y cambiabamos,
cada vez q nos juntabamos,
incluso puede que a peor.
Y tengo que reconoces que me encantaba
cada insignificante cambio
que yo me lanzaba a probar
Contigo
El problema era que
aunque ahora escriba en plurar
Siempre tuve miedo de que
tu no quisieses
cambiar
Conmigo
Y lo peor, ademas de mi nueva tendencia a tirarme en cualquier suelo con respaldo con un poncho mexicano y una guitarra, es que tu me incitases a hacerlo.